En muchas ocasiones, la ortodoncia no puede dar solución 100% a estos problemas, por eso recurrimos a la cirugía ortognática.
Con la cirugía ortognática conseguimos una buena estabilidad en la oclusión y una óptica funcionalidad y estética bucofacial
El estudio, diagnóstico y tratamiento previo con ortodoncia es una parte vital para evitar complicaciones de cara a la cirugía ortognática.
Es muy importante tener una comunicación fluida con el equipo de cirugía maxilofacial para poder compartir los objetivos comunes. Es un trabajo en equipo que requiere de los dos profesionales tanto ortodoncista como cirujano maxilofacial para que el tratamiento sea exitoso.
El segundo estudio que realizamos, previo a la cirugía, es determinante para saber qué movimientos quirúrgicos debe realizar el cirujano. Además, diseñamos y fabricamos las férulas que se utilizarán en la cirugía para posicionar los maxilares en el lugar adecuado. En este estudio se realiza un TAC cráneo-facial para poder programar en 3D la cirugía y así lograr mayor exactitud en la planificación del caso.
Los resultados que obtenemos de la cirugía ortognática son sin duda satisfactorios y duraderos de por vida.